
Cada vez que releo el cuento del patito feo a mi hija, encuentro nuevas similitudines con mi recurrido vital como niño varón Altamente Sensible y con el de la mayoría de HAS (Hombres Altamente Sensibles) que acuden a mi consulta.
❇️ La aparente desproporción (emocional), por ejemplo, con sus agraciados hermanitos (menos sensibles), aún sea capaz de lanzarse igualmente al agua (a su ritmo), sostenerse (con el apoyo de padres Altamente Sensibles que se reconocen y aceptan) y nadar (ser feliz).
❇️ Y como cuando mamá pata le lleva a la granja (escuela) donde el resto de animales (compañeros con mochilas llenas de estereotipos sobre la masculinidad) se ríen de el. El pobre patito no recibe más que picotazos, burlas y empujones. Incluso sus hermanos le maltran a veces diciéndole ¡Ojalá te pille el gato grandullón! (ojalá fueras más fuerte, agresivo y hombre).
❇️ Resumiendo, el cuento sigue (Atencion: incluye spoiler 😝) con la huida (ensimismamiento), pensando que los otro animales no quieren estar con el. Pasa por encuentros (relaciones) que le hacen dudar sobre sus capacidades y hasta plantearse si adaptarse a ese mundo (ser sensible o masculino) hasta que un día ve unas hermosas aves blancas (nueva masculinidad). Se siente inquieto y impresionado, deseoso de ser como aquellos cisnes.
❇ Tiene que pasar pero primero por un rígido invierno en un pantano con muchas penurias entre las cañas (trabajo personal) antes de volver a cruzarse con una bandada de cisnes (círculo de hombres). Después de los primeros miedos (resistencias) el patito empieza a confiar de nuevo (con mucha ternura) y espejandose en el lago (en un grupo terapéutico, los compañeros hacen de espejo), se da cuenta de que también el es un precioso cisne (hombre sensible que empieza a reconocerse y aceptar los desafíos y las tantas oportunidades).
❇️ Recuerda tantos trabajos y penalidades, pero ahora se siente muy, pero muy feliz. Jamás soñó que podría haber tanta felicidad, cuando era sólo un patito feo (niño varón Altamente Sensible no escuchado y respetado por sus cuidadores y educadores).
Fin (nuevo comienzo)
Francesco
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